Fabricamos camas en nuestra fábrica de Svelvik desde 1947. Todavía estamos allí hoy y tenemos la misma pasión por las camas y la mano de obra necesaria para construirlas. Al mismo tiempo, desarrollamos constantemente nuevos productos y funciones. Combinando nuestros materiales y textiles de inspiración natural con un lenguaje de diseño escandinavo y atemporal, creamos camas y accesorios de cama con un excelente confort para dormir.

La cama tiene un papel central en nuestras vidas. Si no dormimos bien, no podremos vivir como queremos. Para poder rendir en la vida cotidiana, dependemos de despertarnos descansados. Es por eso que trabajamos constantemente para encontrar nuevas formas de aumentar la calidad del sueño a través de nuestras camas y accesorios de cama. Muchos de los productos más innovadores de la industria provienen de nuestra fábrica en Svelvik, y hemos recibido dos veces el premio "Premio al buen diseño" del Consejo Noruego de Diseño.

Tenemos la experiencia, la auténtica tradición artesanal y los conocimientos para crear soluciones innovadoras que proporcionen mejores camas y colchones. Nuestra pasión por la comodidad del sueño, nuestro enfoque en el diseño y la calidad, y nuestra firme creencia de que nadie debe quedarse atrás porque está cansado significa que siempre puede confiar en nosotros cuando se trata de sueño y calidad del sueño.

La altura, el peso y la forma del cuerpo son factores importantes a la hora de comprar un colchón. El colchón debe brindar un soporte cómodo a todo el cuerpo y mantener la columna lo más recta posible. Un buen colchón debe adaptarse y soportar tu cuerpo y ofrecer la resistencia adecuada para que tu cuerpo pueda descansar. Esto le permitirá relajarse y dormir mejor. Por lo tanto, el grado de firmeza que elijas es importante y debes tomarte tu tiempo a la hora de probar una cama en la tienda. El colchón debe responder a los impulsos de su cuerpo, facilitando darse la vuelta en la cama. Es especialmente importante que los hombros y las caderas puedan hundirse en la cama. Si tu cuerpo puede relajarse, no te despertarás rígido por la mañana. Un buen colchón también reduce el riesgo de presión incorrecta, dolor de espalda y sueño inquieto.